Tiende tu cama

Tiende tu cama y otros pequeños hábitos que cambiarán tu vida y el mundo” es el nombre del libro de William H. McRaven, quien nos convoca a hacer todos los días cosas pequeñas al iniciar el día y, además, a realizarlas de la mejor manera, con mucho esmero. La importancia de ello reside en que esas pequeñas tareas, bien hechas, nos ayudarán a estructurar nuestra mente y a prepararnos para que las actividades que hagamos durante el día también las cumplamos con rigurosidad y meticulosidad. Sostiene que hacer la cama de la manera correcta no era motivo de elogios, sino algo que se esperaba de él en la escuela donde se formó.

Hacer la cama constituía la primera tarea del día, y cumplirla correctamente era importante. Era una demostración de disciplina. Denotaba que ponía atención a los detalles y, al final del día, sería un recordatorio de que había hecho algo bien, una tarea de la cual podía enorgullecerse, sin importar lo pequeña que hubiera sido.

Dice que más adelante se dio cuenta que esa pasión por la limpieza y el orden se aplicaba a cada aspecto de su vida; que todos debemos estar conscientes que la vida es difícil y que en ocasiones podemos incidir poco en el resultado de nuestro día; que, por tanto, en esas circunstancias hacer la cama es algo que puede ofrecerte consuelo, que puede motivarte a iniciar el día, que puede brindarte una sensación de orgullo en un mundo a menudo complicado y riesgoso. En suma, que el simple acto de hacer la cama puede darte el impulso que necesitas para comenzar tu día y proporcionarte la satisfacción necesaria para darle un final adecuado.

Por otra parte, hay que tener siempre presente que en tu vida necesitas a personas que te apoyen en los momentos difíciles. Que lo que logras a lo largo de la vida es el resultado de la ayuda que mucha gente te proporcionó en el camino. Y que tampoco estamos a salvo de los momentos trágicos de la vida. Por ello hay que compartir la vida, tener tantos amigos como se pueda y jamás olvidar que tu éxito depende de los demás.

Otro aspecto que trata McRaven en su libro es que somos muy dados a responsabilizar a alguna fuerza externa por lo que nos pasa en la vida, y dejamos de esforzarnos porque creemos que el destino está en nuestra contra. Es fácil pensar que el sitio donde crecimos, la manera en que nos trataron nuestros padres o la escuela a la que asistimos son todo lo que determina nuestro futuro. Y nos recuerda que los hombres y mujeres extraordinarios se definen por la manera en que lidian con las injusticias de la vida. Y sobre ello, remata diciendo, la vida es una contienda y el potencial de fracaso está siempre presente, pero aquellos que viven con temor al fracaso, a las dificultades o a la vergüenza, jamás alcanzarán su máximo potencial. Si no desafías tus límites, si no te deslizas de cabeza de vez en cuando, si no arriesgas en grande jamás sabrás lo que verdaderamente puedes lograr en la vida. Si no tienes valor, otros pueden definir tu destino y estás a merced de las tentaciones de la vida. La falta de valor permite que gobiernen tiranos y déspotas. Sin él, ninguna sociedad puede prosperar y engrandecerse.

La vida está llena de momentos difíciles, pero allá afuera siempre hay alguien a quien le está yendo peor que a ti. Recuerda, empieza siempre cada día con una tarea cumplida. Si tiendes tu cama cada mañana, habrás cumplido la primera tarea de tu día. Te dará una ligera sensación de orgullo y te alentará a hacer otra tarea más, y otra y otra. Para el final del día, esa tarea cumplida se habrá convertido en un sinfín de tareas cumplidas. Tender tu cama también reforzará la certeza de que las pequeñas cosas de la vida tienen importancia. Si no puedes hacer las cosas pequeñas correctamente, jamás harás las cosas grandes, correctamente.

William McRaven termina su texto exhortándonos a que empecemos cada día con una tarea cumplida, a encontrar a alguien que nos ayude a lo largo de nuestra vida, a respetar a todo el mundo. No olvidar que la vida no es justa y que fracasaremos a menudo, pero que si tomamos algunos riesgos, si tomamos la iniciativa cuando las cosas parecen estar en su peor momento, si hacemos estas cosas la siguiente generación y las generaciones por venir vivirán en un mundo mucho mejor que el que tenemos en la actualidad. Y lo que empezó con una pequeña tarea realmente cambiará al mundo para mejor.

@SalvadorHV
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