Josefina Vázquez Mota, aspirante presidencial del Partido Acción Nacional, aseguró: “si el PRI gana en 2012, la democracia correrá peligro”. En México uno de los avances en cuanto a las elecciones constitucionales es que ya está superado que el voto de cada ciudadano cuenta y se respeta. Si partimos del reconocimiento de que nuestro régimen político es de democracia representativa y que éste tiene su sustento en el sistema electoral y en el sistema de partidos, en la medida en que en las últimas dos décadas hemos reconstruido nuestro sistema electoral, que cuenta con órganos electorales ciudadanizados, con tribunales electorales y que los militantes de todos los partidos cuentan con una legislación que protege sus derechos partidarios, ya no están sólo a expensas de las decisiones de sus dirigencias. Por ello no se puede seguir alegando que los partidos políticos son iguales a como estaban constituidos hace 20 años.
Estos argumentos se caen por sí solos frente a hechos como por ejemplo la resolución del TRIFE de que el PAN debe reponer el método de elección de sus candidatos a diputados federales. En otra circunstancia esta atribución apropiada por el CEN del albiazul la hubieran impuesto a su militancia, incluso en contra de los reclamos de los panistas inconformes. La protección de los derechos de los militantes consagrados en la ley, aunque ya estaban en los estatutos de los partidos, obliga a un cambio en la relación de las dirigencias con los militantes y por tanto aunque los partidos mantengan las mismas siglas estos también están cambiando. Sin embargo queda claro que una de las asignaturas pendientes de los partidos es la democracia interna.
Se ha avanzado en la reglamentación de las precampañas sobre todo en relación a los tiempos, el uso de recursos públicos, las condiciones en que deben hacerse las precampañas externamente. Queda pendiente la reglamentación partidaria que promueva la democracia interna de los partidos, para elegir a sus cuadros dirigentes y a sus candidatos a puestos de elección popular. Uno de los problemas exhibidos por el PAN es un retroceso en sus métodos internos, cuando no estaban en el poder, internamente eran más cuidadosos y promovían la participación de su militancia.
El ejercicio del poder ha obligado a los integrantes del gobierno panista, en aras de conservar su dominancia, a secuestrar políticamente el partido para asegurar su permanencia más allá del periodo que les corresponde y esto lo resienten los grupos que están fuera del poder público. En este sentido el cambio que ha tenido Acción Nacional transita hacía el autoritarismo y aquí sí la democracia corre peligro. La propia Vázquez Mota está presionando en su partido para adelantar los tiempos de elección del candidato, pero más preocupada en que los otros partidos no se le adelanten que en impulsar un ejercicio democrático intrapartidista.
El PRD para elegir a su candidato incluso recurrió a unas encuestas para decidir a su abanderado ¿Podrá llamarse democrática esta manera de procesar las decisiones de la militancia de un partido? Por otra parte, en el partido del sol azteca todavía están entrampados con la elección de los consejeros políticos nacionales impugnados. Esto también evidencia que hay que avanzar en la democracia, pero de esto no se puede concluir que por estas circunstancias tal o cual partido político sea un peligro para la democracia. La democracia como lo plantea Martha Harnecker: “no se decreta desde arriba, ella no es posible sin un proceso de transformación cultural de la gente, y que este objetivo no se logra sólo a través de la formación política o de la propaganda ideológica, sino a través de la propia práctica”. En todo caso, la democracia está en peligro porque los partidos no promueven la participación interna.
Para avanzar en la democracia, sostiene Harnecker, lo siguiente: “donde sea posible debemos incorporar a las bases en el proceso de toma de decisiones, y esto quiere decir que hay que abrir espacios para que la gente se exprese”. Un ejemplo de ello es el proceso de elección de consejeros políticos estatales y municipales realizado por el PRI en Coahuila el domingo pasado. Hubo una participación de más de 300 mil entre militantes y simpatizantes del tricolor, sin campañas mediáticas de por medio.
Salvador Hernández Vélez
